Monday, May 4, 2015

Ansiedad, una molestia juvenil




 La mayor parte de los estudiantes del CDLA puede que hayan o estén experimentado la sensación de ansiedad, la cual les impide realizar sus actividades diarias ya sea como estudiar, exponer, comer, dormir, entre otras. Pero lo principal para tratar éste problema es conocer su concepto y síntomas, tal como una enfermedad. La ansiedad se denomina como la condición de una persona que experimenta una conmoción, intranquilidad, nerviosismo o preocupación. Para la medicina, la ansiedad es el estado angustioso que puede aparecer junto a una neurosis u otro tipo de enfermedad y que no permite la relajación y el descanso del paciente. Sus síntomas: Tensión, insomnio, desesperación, palpitaciones fuertes, boca seca, nudo en la garganta, y respiración acortada son los más destacados. Ciertamente la ansiedad impide el deseo de realizar algo con tranquilidad, por lo tanto mostraré algunas técnicas eficaces para combatir ésta enfermedad y poder continuar de una forma plena con las acciones diarias.

1.- Distracción – En algunas ocasiones resulta muy bien ésta técnica, y puede realizarse ya sea hablando con alguien, cantando, entre otros; por supuesto servirán mucho más las actividades que tú goces por preferencia propia para distraerte.

2.- Respiración diafragmática lenta – Es reconocido que realizar esta técnica es muy útil para relajarse. Pon tú mano en el pecho y otra sobre el estómago para estar seguro de que estás llevando el aire a la parte de debajo de los pulmones, sin mover el pecho. Al tomar el aire, lentamente, lo llevas hacia abajo, hinchando un poco el estómago y barriga, sin mover el pecho. Después retienes un momento el aire en esa posición, lo sueltas de forma lenta, hundiendo un poco el estómago y barriga, aún sin mover el pecho. Procura mantenerte relajado y continúa con esto un poco más al soltar el aire.
3.- Autoinstrucciones – Se trata sobre decir frases o mensajes dirigidos hacia ti mismo para afrontar con adecuación el pánico, por supuesto siendo positivos. Esto con el propósito de contrarrestar tú tendencia automática a hacer interpretaciones catastróficas cuando notas las sensaciones temidas.

4. – Afrontar las sensaciones sin tratar de evitarlas – Cuando comienzas a sentir la ansiedad, deja que pasen esas sensaciones, porque en realidad, cuando más intentas huir de ellas, más aumentan, y si las buscas, es difícil que las encuentres, así que si las aceptas, disminuyen.

5.- Relajación – Es casi lo mismo que la distracción, sólo que esto sí implica que hagas una acción que te relaje, algo que
no requiera esfuerzo, tal y como practicar un deporte que te guste, escuchar música, o cualquier otra actividad que tu conozcas te tranquilice.

Espero que con éstos consejos puedas llevar a cabo tú vida diaria con paz, tranquilidad y diversión.


Por: Renán González Pérez estudiante de CDLA  

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